La escultura "Esculptura Arbol" de Elena Orekhova es una encarnación visual del profundo significado de nuestras raíces. Cada uno de nosotros crece desde su propia fuente única, nuestras raíces son el fundamento de nuestra individualidad, historia y fortaleza. Al igual que un brote que se eleva hacia la luz, nuestra vida comienza con raíces que no pueden ser arrebatadas o destruidas, si las valoramos y conocemos.
La escultura recuerda que conocer nuestra naturaleza y origen nos da estabilidad y nos permite crecer, desarrollarnos y prosperar, independientemente de los cambios en la vida y los cambios de lugar. El entendimiento de nuestros códigos genéticos, la historia de nuestra familia y el patrimonio cultural es esa fuerza inmutable que nos permite mantenernos íntegros y seguros de nosotros mismos.
"Esculptura Arbol" nos dice: no temas los cambios, no temas los movimientos y los nuevos horizontes. Porque cuando tienes raíces fuertes, siempre sabrás a dónde pertenecer, y tu "corona", tu vida y logros, será fuerte y estable. No necesitas elegir hacia dónde ir cuando tienes una clara comprensión de de dónde vienes y qué constituye tu esencia.