Daniel Bottero se graduó de la Escuela Nacional de Bellas Artes en Buenos Aires. En 1990, se trasladó a la ciudad de Nueva York, donde ha vivido y trabajado desde entonces.

Sus colores son fácilmente reconocibles, al igual que las técnicas de pintura elegantes combinadas en sus dibujos con complejos efectos espaciales y texturas. Siempre buscando una manera de descubrir un carácter perdurable para representar el mundo de las apariencias, ya sean reales o imaginarias, Bottero ha explorado innumerables métodos de pintura a lo largo de su carrera en Europa y América.

Hoy en día, su estilo es suelto y fluido, además de estar distinguido por la certeza de que los campos de color se convierten en parte de su propio lenguaje visual de imágenes y signos. Sus pinturas pueden apreciarse desde una perspectiva de sutiles atracciones con armonías de colores, hasta imágenes llenas de referencias emocionales. Desde líneas delicadas que aparecen y se desvanecen mientras se fusionan con hermosos fondos coloridos, las formas y figuras seducen al espectador para que se convierta en parte de la pintura y cree su propio final para una historia universal.

Las obras de Bottero han sido exhibidas en diversas partes del mundo. Sus pinturas forman parte de las colecciones corporativas de Citibank, Avon, Merrill Lynch y JP Morgan Chase Bank. Sus piezas pertenecen a varias colecciones privadas, incluidas las de la Senadora Hillary Rodham Clinton, Dan Marino, Gloria y Emilio Estefan, Al Pacino, Steven Segal y Oscar de la Hoya. Asimismo, sus obras han sido exhibidas en el Museo de Arte de Fort Lauderdale, el Museo de Arte Latinoamericano en Laguna Beach, California, el Museo de Arte de Ponce en Puerto Rico y el Centro Cultural Recoleta en Buenos Aires. Las pinturas de Bottero también forman parte de las casas de subastas Sotheby’s y Christie’s en Nueva York.